“Las visitas van a ser agendadas, de adentro para afuera, es decir, el interno es quien indica quien lo va a visitar. Sería como ‘de dentro para afuera'”, expuso Maciel en contacto con La Unión.
En ese sentido, los presos deberán brindar a las autoridades de las penitenciarías el número de teléfono de las personas que desean que los visite, de modo a avisarles el día y la hora en la que podrán ir.
Indicó que los visitantes deben cumplir con los protocolos que ya habían sido estipulados desde el 17 de mayo pasado, cuando se habilitó la entrada de familiares de reos. “Tienen que estar en buena salud, usar tapabocas y someterse a los controles sanitarios que se establecen en cada cárcel”, expuso, recordando que el objetivo es que personas infectadas con coronavirus no entren a las penitenciarías, enfermedad que en ninguna de ellas ha sido registrada hasta el momento en nuestro país.
Maciel aclaró que, de momento, solamente visitas familiares y sociales están habilitadas, no así las íntimas.