La FIFA publicó este viernes la decisión en torno al caso del jugador peruano Paolo Guerrero. La matriz del fútbol a nivel planeta decidió, después de analizar todas las circunstancias específicas del caso, suspender al futbolista del Flamengo por un año. El deportista dio positivo a resultados de análisis científicos de metabolito de cocaína benzoilecgonina, una sustancia incluida en la Lista de sustancias prohibidas de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA, por sus siglas en inglés) del 2017, bajo la clasificación “S6. Estimulantes”, siguiendo una prueba de control de dopaje realizada después del partido de las clasificatorias de la CONMEBOL para el Mundial Rusia 2018 jugado en Buenos Aires, Argentina, el pasado 5 de diciembre del presente año.
Por dar positivo a esta sustancia prohibida, la FIFA manifestó que el futbolista violó el artículo 6 de su Reglamento Antidopaje y, como tal, también quebrantó el artículo 63 del Código Disciplinario de la matriz del balompié mundial.
La FIFA informó que el período de sanción se tomará en cuenta desde el 3 de noviembre de 2017, fecha en la cual Guerrero fue suspendido provisionalmente por el Comité Disciplinaria de la FIFA.
De acuerdo con el artículo 29 del Reglamento Antidopaje del rector del fútbol, la suspensión cubre, entre otros, todo tipo de partidos, incluyendo campeonatos locales, internacionales, amistosos y todo tipo de juego que esté incluido en calendarios oficiales.
La FIFA indicó que el jugador ya ha sido comunicado y notificado debidamente acerca del medida.
Con la suspensión, Paolo Guerrero se perderá el Mundial Rusia 2018, máximo evento del fútbol a nivel planeta para la que su selección, Perú, clasificó luego de 36 años. Además, se perderá la Copa Libertadores de la temporada entrante, competición para la que su club, el Flamengo de Brasil, calificó para disputarla desde la segunda fase.