Las pruebas se realizan en el marco del cumplimiento con la nueva Ley Nº 6318/19, la cual estipula el desbloqueo de listas o voto preferencial.
“Se trata de una prueba de funcionalidad. Deben cumplir todos los requisitos, especialmente que asegure el secreto del voto, la auditabilidad, que garantice que el escrutinio sea público, la impresión de actas y certificados de resultados. Todos estos requisitos son prioridad”, explicó Luis Salas, director de Recursos Electorales del TSJE, en contacto con La Unión, afirmando a la misma vez que serán evaluadas cinco máquinas de cada empresa que se ha postulado a la licitación, las cuales son Magic Software Argentina (MSA) y Smartmatic, de Inglaterra.
Así mismo, dijo que será probados el funcionamiento de sus baterías y el gramaje respectivo de los tickets emitidos.
Salas aseveró que solamente funcionarios del TSJE y empresas oferentes participarán de la revisión de las máquinas de voto electrónico.
En ese orden, aclaró que todavía no está definido si representantes de partidos podrán auditar el software antes o después de la adjudicación del contrato.