El fiscal del caso, Gabriel Segovia, afirmó que ha ordenado la prisión preventiva de los tres sujetos, entre ellos la madre del chico, imputada por deber del cuidado. Por su parte, las otras dos personas, que serían los “compradores”, serán imputadas por violar el proceso de adopción.
Según argumentó la mujer ante la Policía, supuestamente dejó en la casa de estas dos personas por “motivos laborales, ya que en su trabajo no le dejan llevar a la criatura, y que cuando volvió no encontró a nadie en la casa”. No obstante, dijo que han surgido versiones de que la madre ya había intentado vender a su hijo, por lo cual se ha abierto su imputación.
La madre biológica del bebé se expone a una pena de hasta 5 años de cárcel.