“Hoy en día uno de los mayores problemas es el tema de la quema de basuras. Se quema el borde de los caminos y ese fuego ingresa a los campos y es bastante preocupante. Tenemos el fenómeno de la Niña, es alto nivel de la sequía y hoy en día nos queda instar a la gente que no quemen”, aseveró Goralewski en contacto con La Unión.
Aseveró que de los incendios ocurridos el año pasado en el Chaco, se han abierta 50 investigaciones, aunque admitió que es muy difícil comprobar al autor o los autores de estos actos cuando ya se vuelven incontrolables. “Tendremos que seguir abriendo investigaciones porque la inconsciencia sigue”, dijo.
En ese orden, la titular del INFONA criticó tanto a terratenientes como a pequeños campesinos que llevan a cabo estas quemazones de pastizales y rastrojos para realizar siembras. “Eso de que el fuego mejora la calidad del suelo, es algo que hace años se demostró científicamente que no es así”, subrayó.
Lamentó que estas situaciones incluso afecten a parques nacionales y reservas forestales. Aunque existe la ley Nº 4.041 (que habilita la quema controlada), aseveró que “la quema debería estar totalmente prohibida”.
En ese sentido, dijo que tanto el INFONA como el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES) lo único que pueden hacer es imponer multas administrativas a los infractores, cuya máxima prevista es de 1.000 jornales. Sobre el punto, señaló que lo que se debe detener es la impunidad judicial ambiental. “Por ejemplo, hubo un caso cómico en la Reserva de Itaipú, que eran unos invasores que estaban quemando y a quienes se los encontró con las manos en la masa, se los envió a prisión domiciliaria. O sea, ellos volvieron al mismo lugar donde estaban sacando árboles mientras dura su juicio, y siguen echando árboles”, criticó Goralewski, exigiendo que la justicia dicte condenas ejemplares contra quienes atentan de esta manera contra el medio ambiente.
Consultada sobre cómo podrían evitarse más incendios, dijo que es clave el monitoreo y control de la gente.