La Agencia Tributaria española ha enviado a la Fiscalía una denuncia contra Shakira por presunto delito fiscal durante cuatro ejercicios (2011 2014), según confirman fuentes próximas a la acusación. La denuncia se remitió al final del año pasado, cuando la inspección decidió suspender sus trabajos y remitir la información a los fiscales. Ahora, la acusación pública debe decidir si coincide con el criterio de Hacienda y, en consecuencia, presenta querella.
La inspección de Hacienda sostiene que entre el 2011 y el 2014, Shakira debería haber declarado como residente en España y, por lo tanto, tributado al fisco del país por la mayor parte de sus ingresos en el mundo. Según su criterio, esto sería un delito –aunque en el caso del año 2011 ya habría prescrito–, agravado por el importe defraudado, y gravado con dos años de condena.
Ante la inspección, los representantes de la artista colombiana han defendido que la mayoría aplastante de sus ingresos procede de sus giras y actuaciones en el mundo y, como consecuencia, durante los años que la Agencia Tributaria ha investigado ella pasaba la mayor parte del año fuera de España, por lo que no sumaba los 183 días que establece la legislación como primer criterio para definir si un contribuyente debería ser residencia fiscal.
Según fuentes como Forbes, Shakira ingresaba a comienzos de la década 25 millones anuales con sus giras mundiales, la cuarta en el ranking mundial.
El núcleo del contencioso entre la Agencia y Shakira se refiere a su residencia a efectos fiscales. Desde el 2011, cuando se formalizó públicamente su relación con el futbolista azulgrana Gerard Piqué, y hasta el 2014, es decir cuatro años, la artista colombiana se ha mantenido como residente fiscal fuera de España.
Fuente: La Vanguardia.