Hoy, en el “Día Mundial del Climaterio y Menopausia”, la cartera sanitaria recuerda la importancia de mantener los hábitos saludables y así llevar una vida más placentera.
Este 18 de octubre, con el lema: “Cognición y estado de ánimo”, se recuerda el “Día Mundial del Climaterio y Menopausia”. En la oportunidad, se realiza hincapié en la atención integral de la salud de las mujeres en todas las edades.
Los temas que respectan a la salud de esta población son varios, sin embargo, el Ministerio de Salud hoy aborda, especialmente, sobre el climaterio y la menopausia y los cuidados de la salud que se deben tener en cuenta.
La menopausia es el cese de la menstruación. Climaterio es el final del periodo fértil, que se caracteriza por una serie de modificaciones paulatinas, que llevan a un nuevo estado biológico no reproductivo. Si bien el climaterio es una etapa fisiológica, los síntomas pueden deteriorar la calidad de vida (alteraciones de humor, oleadas de calor, sofocos, cuadros depresivos y alteraciones en la sexualidad).
El climaterio puede darse entre 2 y 8 años antes de la menopausia y culminar entre 2 y 6 años después de la misma. Mientras que la menopausia, que es el cese permanente de la menstruación, se confirma 12 meses después del último ciclo menstrual. Durante el climaterio, se producen cambios hormonales desfavorables a la protección que ejercen las hormonas sexuales femeninas sobre el organismo, incrementándose el riesgo para la salud y la vida, cuando la mujer todavía se encuentra laboral y socialmente activa.
Se insta a acudir a consulta, para brindarle una atención e información calificada.
Para llevar una vida más plena y feliz en esta etapa, es importante:
– Mantener un estilo de vida saludable.
– Practicar actividad física, por lo menos 3 a 4 veces por semana.
– Sostener una alimentación nutritiva.
– Evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
– Evitar el tabaco.
– Acudir a las consultas ginecológicas y realizar controles anuales de PAP y mamografía.
– Referir los antecedentes familiares.
– Mantener una adecuada higiene.
– Controlar el peso.
– Dormir lo suficiente.
En todas las etapas de la vida, la alimentación saludable es clave.
Proveerle al cuerpo una correcta alimentación y nutrición. Se trata de un acto consciente, al mismo tiempo modificable, a través de la educación. A continuación, se exponen algunas recomendaciones prácticas para una alimentación saludable:
1- Que los alimentos naturales o mínimamente procesados sean la base de la alimentación.
2- Al planear las actividades, incluir la compra y preparación de alimentos.
3- Al cocinar, disminuir la cantidad de sal, azúcar y grasas.
4- Reemplazar la sal por hierbas aromáticas o especias como el orégano, limón, ajo, cebolla, etc.
5- Practicar la lectura del etiquetado nutricional de los alimentos envasados, para identificar el contenido de sodio y otros nutrientes críticos.
6- Incluir 5 porciones de frutas y verduras de diferentes colores en la alimentación diaria.
7- Preferir siempre el agua como fuente principal de hidratación. Evitar el consumo de bebidas azucaradas.
8- Disfrutar la comida: comer regularmente, despacio y siempre que se pueda, en compañía.
9- Preparar alimentos saludables y compartir las recetas, especialmente, con los niños y jóvenes.