“Este señor Jorge Fernández se presentó en mi empresa como Presidente de Lamborghini. Puso sobre mi mesa papeles viejísimos, una pila de demandas judiciales, de hace 30 años, de cuando él decía tener derecho de uso de marca”, comentó relatando Samaniego en contacto con La Unión.
Indicó que, en primer lugar, le pidió planos para construir autos como los de Lamborghini. Cuando Samaniego le respondió que no poseía ningún plano como esos, el mexicano le propuso viajar a China para conseguir vehículos similares.
“Me dijo ‘conseguimos una marca que sea desconocida en Paraguay, compremos los vehículos desarmados, montemos en tu planta y pongámosles la marca Lamborghini'”, aseveró Samaniego.
Señaló que, ante la propuesta, se negó rotundamente, sosteniendo que se trataría de un terrible fraude, tras lo cual Fernández desapareció.
Ya en estos días, aseguró que le sorprendió de forma grandiosa haber visto al mismo hombre saliendo en una foto con el propio Mario Abdo Benítez. “Para mí fue lamentable el poco respeto que se le tiene al presidente de la República al hacerle llegar hasta el Palacio de López a semejante personaje”, repudió.