Una de ellas radicaba que choferes denunciaron que patronales de la empresa privada para la que trabajaban descontaban de sus salarios los aportes de IPS. Sin embargo, no pudieron cobrar de jubilación, lo cual es una estafa.
Otra consistía en una denuncia de dos funcionarias embarazadas que fueron echadas por autoridades del IPS, en violación a la ley de protección.
La última se basaba en la denuncia de una mujer que señalaba que IPS no le brinde medicamentos que necesitaba, a pesar de ser asegurada. La anciana padece de aplasia medular, ante lo cual medió para conseguir en la brevedad posible el remedio en cuestión.
Godoy afirmó que se reunió con el presidente de IPS, Armando Rodríguez, sobre quien dijo que “no le gustó mi presencia ahí”. “Si desde la cabeza se imparte soberbia, dejadez y burocracia, eso se transmite a los funcionarios inferiores, entonces hacemos que la institución no funcione”, expresó en comunicación con La Unión, añadiendo que “no sirve ni para la tranca del infierno, viejo”.
Anunció que elevará todas las denuncias hechas por los afectados ante el Ministerio Público.