De acuerdo con la denuncia, pese a que su mamá estaba grave de salud, jamás le entregó el dinero.
La acusación fue presentada por la agente fiscal Sussy Riquelme, quien en el juicio oral y público, en sus alegatos finales contra la procesada, Odila Enciso de Mereles, solicitó la pena privativa de libertad porque quedó comprobado, en el marco de las investigaciones, la conducta reprochable de la acusada.
La denuncia formulada por la familia de la señora Wenceslaa Báez de Enciso remarcó que ella residía en Curuguaty, y que en el año 2012 fue beneficiada por el Ministerio de Hacienda, para retirar una indemnización de 63.777.000 guaraníes. Se hizo presente en la sede ministerial acompañada de su hija Odila, quien retiró el dinero.
Posteriormente, Wenceslaa Enciso empeoró en su estado de salud, dado que sufría de diabetes e incluso perdió una de sus piernas, y los familiares le pidieron a Odila Enciso de Mereles que le entregara su dinero, pero ella hizo oídos sordos a los reclamos.
Ante el pedido de condena presentado por la Fiscalía, el Tribunal presidido por la jueza Claudia Criscioni e integrado por los magistrados Manuel Aguirre y Lourdes Peña halló culpable a Enciso de Mereles y la condenó a 2 años de cárcel, con suspensión de la condena. En ese lapso, la condenada deberá devolver el dinero, caso contrario, deberá cumplir su pena en prisión.
- Informe de la Fiscalía.