El cambista Darío Messer, uno de los principales buscados por la operación Lava Jato en Brasil, es un personaje ligado a escándalos en territorio brasileño desde el caso Banestado, el cual consistió en envío de remesas ilegales por el sistema financiero público brasileño, operaciones realizadas a mediados de la década de 1990.
En 2005, el también cambista Toninho da Barcelona dijo a la Comisión Parlamentaria de Investigación del caso Banestado que Darío le “repasó” dinero proveniente del exterior de modo a ser lavado para el Partido de los Trabajadores (PT), según una publicación de O Globo.
De acuerdo al portal, Messer es un cambista de segunda generación, ya que su padre, un inmigrante polaco de nombre Mordko, era un de los grandes “doleiros” (cambistas) de la zona de Río de Janeiro. Darío heredó el negocio y lo hizo crecer.
Su familia llegó a ser dueña del banco “Dimensão”, presidido por el hermano de Darío, Paulo Messer.
De acuerdo a lo publicado por la página brasileña de noticias, fue gracias al padre que Darío consiguió no solo la ciudadanía paraguaya, sino también entablar amistad con el actual presidente de la República, Horacio Cartes, quien dejará el cargo en agosto próximo.
Cartes, según Darío cuenta, trabajaba con dólares en la frontera con el Brasil décadas atrás hasta que finalmente quebró. Fue entonces que Mordko le prestó dinero para “reconstruirse”.
Más tarde, Cartes terminó convirtiéndose en uno de los grandes referentes de la industria paraguaya, siendo el mayor fabricante de cigarrillos locales. Sobre este punto, la publicación de O Globo afirma que es de estas fábricas, ubicadas en Alto Paraná, departamento fronterizo con el Brasil, sale gran parte de los cigarrillos que llegan al vecino país de contrabando.
Darío tiene una estancia en Paraguay y hasta hoy día mantiene lazos con el presidente Cartes, señala.
Así mismo, el portal indica que Messer es un personaje con un rol de amistades que iban desde Lucio Funaro (economista y “doleiro” preso por el escándalo de la Petrobras por el caso Lava Jato) hasta Ronaldo, el exdelantero de la Selección Brasileña de Fútbol y clubes como el Real Madrid y Barcelona de España, Inter y Milan de Italia, entre otras instituciones deportivas.
Sobre este último punto, el informe indica que ‘O Fenômeno’ acostumbraba a frecuentar las fiestas en el departamento de Messer ubicado sobre la avenida Delfim Moreira, en la zona del mar de Leblon, una lujosa zona de Río de Janeiro situada frente al Océano Atlántico.
Otro portal de noticias, el thn1, indica que Ronaldo y Messer se conocieron a través de los empresarios del crack brasileño, Reinaldo Pitta y Alexandre Martins.
De acuerdo a la información, la afinidad fue tan grande que en 1998 Ronaldo volvió de Europa, donde jugaba por el Inter de Italia, para inaugurar en Río de Janeiro el club nocturno “R9”, que tenían a Pitta, Martins y Messer como socios.