“Estamos preocupados porque nuestro rubro está bastante complicado y se planteó una situación más difícil aún. El país no produce la cantidad necesaria de flores para trabajar en el sector y por eso tenemos que recurrir a algunas medidas para traer de otros países. Prohibir el ingreso de flores importadas, no tiene la lectura real de la situación”, dijo Venicio Samaniego, dueño de la empresa Vemay, en diálogo con La Unión, con relación al pedido del diputado liberal Eri Valdez.
El propietario de la reconocida firma dedicada a la venta de flores pidió a los diputados a charlar y buscar una salida, ya que muchas familias quedarían sin trabajo.
Además, subrayó que no hay evidencia científica de que mediante las flores se contagie el COVID-19.