Las personas mismas han considerado a este fenómeno como un problema, por lo cual han aumentado las consultas al respecto, especialmente de parte de padres que llevan a sus hijos, comentó el psicólogo Richard Gómez en diálogo con La Unión.
“Desde hace años, los chicos están creciendo solos. Los padres les dan celulares o jueguitos para que puedan disponer de su tiempo. Hay una permisividad excesiva”, explicó el profesional.
En ese sentido, dijo que lo importante para superar este problema debe ser desarrollar nuevamente hábitos de “relacionamiento cara a cara”. “Cuanto más carente es la adicción, mayor es la probabilidad de que se vuelvan adictos a estos dispositivos”, señaló.
“Para ello, los padres deben crear las propuestas para compartir, tienen que tener ganas y predisposición de compartir actividades interesantes”, explicó Gómez en referencia al ámbito familiar. Por su parte, en el área educativa dijo que una buena opción es que los chicos “depositen en una caja sus celulares antes de la clase”, como ya lo han hecho varias escuelas, “para desarrollar una clase normal”.