“Lo ideal hubiese sido que los elementos de la escena del crimen estén a disposición allí”, expuso en contacto con La Unión.
Pecci señaló que, como policías que son, ellos saben que nada de la escena de un crimen debe tocarse hasta que llegue personal del Ministerio Público, a excepción de personas que necesiten auxilio por quedar heridas. En el caso ocurrido ayer, dijo que categóricamente se nota que “no es la escena con los componentes que debían estar allí disponibles a la llegada del fiscal”.
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De hecho, mencionó que las cámaras de seguridad habrían desbaratado un plan de los policías intervinientes de endilgar a los delincuentes el asesinato del subcomisario Arístides Peralta.
La otra fiscal del asesinato, Sandra Fariña, señaló que el caso tomó un giro inesperado con la difusión del video de cámaras de seguridad adyacentes al lugar de los hechos.
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Fariña indicó que gracias a las imágenes que grabaron todo el hecho pudo tomar conocimiento de que la camioneta que los policías vestidos de civil utilizaron para frustrar el atraco. Aseveró que ya cuenta con una secuencia de imágenes inmediatamente anteriores al video que fue viralizado, en la que se ve que el automóvil utilizado por los maleantes llegó al lugar después de la camioneta de los tres policías que intervinieron en el caso.
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“Hasta el momento, lo que tengo entendido es que ellos obraron en base a una orden de servicio sin motivo específico”, expuso la agente.
El caso
Un grupo de cinco asaltantes intentaron atracar la sucursal del Banco Visión de Fernando de la Mora este jueves por la tarde, pero no lograron su objetivo debido a que se enfrentaron a efectivos de la Policía Nacional. Lamentablemente, el subcomisario Arístides Peralta falleció en el acto a causa de un impacto de bala en el cuello.
En principio, fuerzas policiales informaron que Peralta murió a causa de un disparo de arma de fuego ejecutado por los asaltantes. Posteriormente, se descubrió que el comisario Julio Cabañas, un propio camarada suyo, fue quien lo habría ultimado.