Miguel Cáceres, abogado de PETROPAR, indicó que el hecho quedó registrado en el libro de novedades de la estación de servicios en fechas 8 y 9 de marzo del año pasado, detallando que hubo una pérdida de aproximadamente 2.700 litros de gasoil. Sin embargo, las autoridades, encabezadas por el entonces titular del ente Eddie Jara, no reaccionaron.
“Los técnicos explicaron que se debió haber trabajado más el suelo para la construcción de esa estación de servicios, porque es prácticamente un humedal. Está rodeado del Parque Ñu Guasu y pasa el arroyo Itay. Requería mayores trabajos de compactación (de la tierra)”, explicó en comunicación con La Unión.
Confirmó que el tanque del surtidor filtraba combustible al arroyo Itay, provocando su contaminación.
Cáceres expuso que presentaron la denuncia contra personas innominadas para que el Ministerio Público investigue el caso desde el planteamiento del proyecto, que data del 2015.