“Los compromisos que tenemos por ahora son muy difíciles de poder cumplir. Hay un 90% de salones que son alquilados, y es algo realmente preocupante. No hay producción, no hay trabajo”, aseveró Ahlers en contacto con La Unión.
“Con los que tenemos alquileres se va a complicar, porque cuando comencemos el trabajo será al 50%”, agregó la estilista, señalando que, de todos modos, los locatarios querrán cobrar las cuotas de inquilinato normalmente.
“Ahora nos estamos tolerando, después no nos vamos a querer más porque nadie le va a querer pagar a nadie”
La asistencia del Gobierno a su sector ha sido nulo, lo cual lamentó.