Francisco recordó que este miércoles se celebra la Jornada Mundial de Oración por la Iglesia Católica en China y envió un mensaje de “cercanía a nuestros hermanos y hermanas de China, compartiendo sus alegrías y esperanzas”.
Y también envió un mensaje especial “a todos los que sufren, pastores y fieles, para que en la comunión y solidaridad de la Iglesia universal experimenten consuelo y aliento”.
Además, invitó a todos a elevar sus oraciones “para que la buena nueva de Cristo resucitado y crucificado sea proclamada en su plenitud, belleza y libertad, dando fruto para el bien de la Iglesia católica y de toda la sociedad china”.
Este llamamiento se produce después de la decisión unilateral de Beijing de elegir un nuevo obispo en Shanghái, la mayor Diócesis de China, lo que violaría el pacto bilateral por el que los obispos se nombran de forma conjunta, un acuerdo alcanzado en 2018 y prorrogado en 2020 y 2022.
El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, informó entonces de que el Vaticano supo de este nombramiento a través de los medios de comunicación.
Durante décadas, el nombramiento de obispos ha sido un motivo de discordia entre ambas partes, debido a que los lazos diplomáticos formales se rompieron después de que el régimen comunista tomara el poder hace unas siete décadas.
El acuerdo fue un intento de aliviar la división en China entre los católicos reconocidos por el Estado y la llamada iglesia clandestina leales al papa.
Con información de Infobae.