En comunicación con la R800 AM, el obispo de Caacupé manifestó su preocupación hacia los jóvenes que se encuentran “deseosos de ser protagonistas y de trabajar”. A su vez, dijo que la sociedad les debe dar espacio para contrarrestar la violencia y la desocupación que hoy afectan al país.
A su criterio, esos son los motivos por los que la Iglesia Católica dedica el novenario de la Virgen de Caacupé y los próximos años a tratar temas y trabajar sobre la realidad juvenil.
Visita a S.S. Francisco
Sobre la audiencia de los obispos en Roma, detalló que el Papa se sintió muy a gusto hablando sobre Paraguay. Tanto, que cuando pasaron más de dos horas de conversación y ellos se despidieron, el Santo Padre les dijo que no tiene problema en seguir hablando.
Valenzuela contó que cuando ya se retiraban se despidió del Papa, aclarando que era él el nuevo obispo de Caacupé. A lo que Francisco respondió: “¡A la Virgencita de Caacupé cuídenmela, cuídenmela!”