El grupo terrorista Estado Islámico (ISIS por sus siglas en inglés) asesinó hoy a al menos 37 civiles en el pueblo de Al Mabuye, donde conviven suníes, alauíes e ismailíes, en la provincia central siria de Hama, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Algunas de las víctimas, entre las que figura una familia entera, fueron decapitadas, mientras que otras fueron asesinadas a tiros y otras quemadas.
Al Mabuye se encuentra en la periferia oriental de la ciudad de Al Salamiya, de mayoría ismailí, una de las ramas del chiísmo.
El ISIS proclamó a finales de junio un califato en Siria e Irak, donde ha tomado partes del norte y el centro de ambos países.
Tras las derrotas recientes sufridas en las provincias sirias de Aleppo y Al Hasaka, ambas en el norte, el ISIS está centrando ahora sus ataques contra objetivos gubernamentales en Hama y Homs, en el centro del país.
El Observatorio no descartó que el número de fallecidos pueda ser superior porque hay datos no confirmados de que al menos seis seguidores del régimen sirio podrían haber perecido también.
Además, varias personas se encuentran en paradero desconocido y no se sabe si lograron huir de la zona o si fueron secuestradas por los yihadistas.
El ISIS efectuó esta matanza después de que la pasada madrugada lanzara un ataque contra Al Mabuye, situada en el este de Hama, que finalmente fue repelido por las fuerzas gubernamentales.
La agencia de noticias oficial siria, Sana, que citó una fuente militar, señaló que el ejército, los grupos de Defensa Popular -milicias civiles progubernamentales- y los vecinos de Al Mabuye hicieron frente a un ataque terrorista.
Según la agencia, los adversarios del ISIS ocasionaron un gran número de pérdidas en las filas de los yihadistas, que, por su parte, causaron la muerte de ocho civiles y heridas a dieciocho.