El INCAN cuenta con un gran equipo de profesionales de salud dedicado a la prevención, el diagnóstico y la detección temprana y el tratamiento de esta enfermedad, desde el Departamento de Patología Cervical y Ginecología y el Departamento de Anatomía Patológica del hospital, donde se atiende a unas 600 mujeres al mes y se registra un promedio de 8.000 consultas al año.
La prevención del Cáncer de Cuello Uterino o Cérvix es una prioridad pues esta es la segunda forma de cáncer con mayor incidencia y mortalidad en mujeres del Paraguay.
El Dr. Jorge Alvarenga, jefe del Departamento de Patología Cervical del INCAN, señala que en el citado servicio llevan a cabo prevención y exámenes de captura; “cualquier persona que no haya hecho su chequeo ginecológico en un servicio de su localidad lo recibe en nuestro hospital. Pero, primordialmente, recibimos casos con un diagnóstico previo –por ejemplo un resultado de Papanicolau alterado- remitido ya de hospitales, unidades de atención primaria o del sector privado. Aquí se hace el control previo al oncológico; hacemos la detección precoz. La idea es llegar a tiempo”, explica.
Alvarenga refiere que, ante cualquier llamado de atención de cualquier médico o licenciado del país que se remite al hospital, se brinda a la paciente el examen correspondiente, y si fuera necesario, la biopsia para llegar a un diagnóstico rápido.”Lo ideal es buscar lesiones precursoras, que no lleguen al cáncer. “Hacemos tratamientos de las lesiones precursoras, que son tratadas de acuerdo a las características y edad de cada paciente”, agrega el médico.
Causas probables de cáncer de cuello uterino
Por su parte, la Dra. Nancy Alvarenga, jefa del Departamento de Ginecología del INCAN expone que las causas probables del Cáncer de Cuello Uterino son varias: “el inicio de relaciones sexuales a muy temprana edad; promiscuidad sexual o cambio de parejas sexuales; la multiparidad: es decir, el haber tenido muchos hijos; el uso prolongado de anticonceptivos orales; infecciones vaginales crónicas no tratadas. Pero actualmente, el principal factor es la infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH)”, detalla.
Indicó que existen subtipos virales del VPH: los de alto riesgo como el 16 y el 18 y los subtipos virales de bajo riesgo como el 6 y el 11, que son causales de los condilomas acuminados, conocidos como verrugas genitales.
La titular del Departamento de Ginecologíasostiene que el virus del Papiloma Humano es el causante del 99 por ciento de los cánceres de cuello uterino. “Con la falta de controles y sin detección precoz, las lesiones de bajo y alto grado con el correr de los años se llega al cáncer de cuello uterino”, asegura, al tiempo que advierte que si el mal avanza, puede invadir otros órganos y llegar a lesiones sin posibilidad de tratamiento local. “En esa instancia ya se precisa tratamiento a nivel general, como quimioterapia o radioterapia y eventualmente la cirugía. En el INCAN esto último ya lo maneja el equipo de oncólogos”, precisa el profesional de salud.
Tratamiento
El medio más utilizado para tratar las lesiones precursoras es la Electrofulguración o el Leep. “El objetivo es que dichas lesiones no lleguen a un cáncer,” manifiesta el Dr. Jorge Alvarenga.
“Lo clave aquí es el control –asegura el ginecólogo- Por ejemplo, una persona que tiene el diagnóstico de una lesión precursora y no regresa a su consulta puede estar permitiendo que el mal avance”. Por otra parte, aclara que la aparición de VPH no siempre deviene en un cáncer, pero no obstante es importante mantener un control periódico.
Cada mujer debe comprometerse a vigilar su salud ginecológica anualmente. Esto es clave para la prevención del Cáncer de Cuello Uterino. Los cuidados deben aplicarse desde el momento en que la mujer inicia su vida sexual, con el estudio del Pap. En servicios del Ministerio de Salud se llevan a cabo de manera gratuita.
El uso de barreras de protección ayuda a prevenir la trasmisión sexual del VPH, pero no son tan efectivas, ya que este mal puede alojarse igualmente en zonas periféricas.
Verrugas genitales
Las verrugas genitales también son originadas por el virus del Papiloma y deben ser tratadas. “Es importante que una mujer o varón que ha tenido verrugas genitales mantenga sus controles porque la presencia de una cepa – o subtipo viral de VPH- no excluye la presencia de otra cepa, causante de algunas formas de cáncer como el cáncer de cuello uterino, de pene, de prepucio, de vulva, de vagina y ano y cánceres de cabeza y cuello como los de lengua y boca, amígdala y oro faringe. De todas estas formas, el cuello uterino lleva el mayor porcentaje de incidencia”, aclara.
Cifras
En el 2017, el INCAN registró 603 nuevos casos de cáncer de cuello uterino, según datos del Departamento de Bioestadística del hospital. El Dr. Jorge Alvarenga lamentó que pese a contar con diagnóstico y tratamiento gratuitos para detectar a tiempo las lesiones precursoras de cáncer, las usuarias sigan recurriendo de forma tardía a la consulta.