“Es una cuestión de práctica. Acá necesitamos padres de familia e iglesia y todos los que tienen alguna forma de control social que trabajemos juntos y saquemos esas pautas violentas de todo lo que es la educación y la formación, porque le estamos enseñando a los niños que por la fuerza se pueden conseguir las cosas. Ese famoso zapatillazo o cinto que ‘nos hizo salir bien’, nos hace violentos. Quiere decir que esa violencia transmitimos otra vez”, expuso Martínez en conversación con Francamente por Unión TV y radio La Unión.
Añadió que “es una vergüenza que criemos a los niños mandándoles a hacer las cosas por miedo y no porque tienen que ser así”.
“Quieren instalar detectores de metales y mochilas transparentes en colegios, pero no estamos atacando el problema de fondo, que es la violencia que reciben los niños”, manifestó la ministra.
En otro orden, confirmó que son más de 17.000 casos de abusos y casos de violencia contra niños y adolescentes los reportados por el Ministerio Público en los últimos 5 años. Añadió que actualmente se registra entre 9 y 10 casos de abuso de niños por día.
Indicó que casi todos los casos se producen en el ámbito familiar y son producto de un círculo de violencia. Señaló que en Central y Alto Paraná son los departamentos con mayores índices.
“Nosotros como país, en la región, estamos muy mal vistos en ese aspecto. Tenemos el mayor número de embarazos adolescentes y de abusos sexuales en niños. Esta es una cuestión que nos tiene que interpelar a todos para que podamos seguir en este combate o si no, seremos ya un país que decidimos no defender los derechos de los niños”, afirmó.
Aseveró que desde el Ministerio de la Niñez trabajan en quitar toda la culpa que la sociedad habitualmente carga sobre la víctima del caso y no sobre el agresor. Sobre el punto, lamentó que alguien como Rafael Esquivel, alias “Mbururu”, haya sido electo senador, así como el caso de Luis Fernando Ramos, electo concejal departamental de Misiones.