“Fueron cinco armas las utilizadas, de calibres diferentes y que ya habían sido usadas en otros hechos punibles en el Departamento de Concepción. Es por eso que esto nos lleva a concluir que las personas que cometieron este ataque son las mismas que cometieron otros hechos punibles y se habían presentado como miembros de la ACA-EP”, dijo Alvarenga en conversación con Cada Mañana por La Unión.
En ese sentido, dijo que, por el peritaje hecho en el sitio y el análisis de los cuerpos, los policías y el guardia fallecidos en ese ataque “fueron ejecutados”.
Antecedente
Dos policías y un guardia de seguridad privada fueron asesinados tras un ataque por parte de desconocidos en zona de San Alfredo, a 60 kilómetros al norte de la ciudad de Concepción, mientras realizaban un recorrido de control por la zona a bordo de una patrullera y el móvil de una empresa de seguridad.
Los fallecidos fueron identificados como Dionisio Ávalos Pereira (subjefe de la comisaría 12ª de San Alfredo), Odelio Insaurralde Rodríguez (suboficial inspector de la misma dependencia policial) y Leónido Medina Ovelar (guardia de seguridad de la estancia San Fernando).
Aunque se sospechó en principio que los autores del hecho fueron miembros del autodenominado “Ejército del Mariscal López” en represalia por la muerte del hijo del líder de este grupo, Alejandro Ramos, el Gobierno descartó esta posibilidad y aún desconoce quiénes lo habrían perpetrado.