Desde la AMIPS señalan que en las últimas administraciones observaron políticas de salud abocadas casi totalmente a las peligrosas Tercerizaciones y prácticamente a todas las deficiencias en materia de salud, solo y únicamente se recurre a esta figura, casi siempre con procesos muy irregulares, direccionadas y con seguridad con costos siempre superiores a los del mercado.
Agregan que en ellas se cuentan, siempre con el guiño infaltable de la Contraloría, la DNCP y luego de la fiscalía si aflora alguna denuncia. Pero no solo esto es lo más grave, a todo sigue cerrar los servicios tercerizados y reubicar a esos funcionarios, muchos de ellos sin que puedan cumplir tareas en otros lugares continuarán con sus salario y en eso se tendrá como siempre gastos, sostienen.