Acevedo señaló que la Constitución Nacional expresa claramente que el servicio civil o sustitutivo, el cual se realiza si la persona se declara en objeción de conciencia, no tendrá carácter punitivo ni gravoso. Sin embargo, afirmó que “esto tiene esas características”, con relación a la multa de G. 400.000 que deben abonar quienes no realicen ninguno de los dos servicios.
“En vez de imponer y penalizar a los jóvenes, se debe garantizar el derecho al empleo de los más de 300.000 jóvenes que no estudian ni trabajan”, expuso en comunicación con La Unión.
Además, calificó de “descabellado” a las multas a las que estarán obligados a pagar los empresarios o empleadores que contraten a personas que no hayan realizado el Servicio Militar ni el servicio civil, ambos obligatorios.
Por todo lo expuesto, el activista afirmó que la medida es autoritaria. “Solamente en la época de Stroessner se creía que los jóvenes pueden corregirse yendo al cuartel”, criticó.
En el mismo orden, Acevedo criticó la inacción del Ministerio de la Juventud, cuyo titular es Felipe Salomón.