“Es una situación preocupante, por las lluvias que inundan los campos que tienen a sus ganados”, lamentó Marys Llorens, empresaria ganadera, quien afirmó que la situación se ha tornado alarmante tras el cierre de los registros del primer trimestre del año.
“Los riachos se desbordan y entonces las inundaciones toman los campos y se debe mudar al ganado”, agregó la conocida empresaria.