Las deportaciones masivas ordenadas por el presidente Nicolás Maduro dejaron a 299 niños solos en territorio venezolano debido a que sus padres fueron deportados a Colombia, denunció la directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Cristina Plazas.
En total, son 154 las familias afectadas, según el diario El Nacional. “Lo importante es aclarar que no solo hay niños colombianos sino también venezolanos a los que se les han vulnerado burdamente sus derechos”, aseguró Plazas, quien agregó que las audiencias que solicitadas al gobernador del estado de Táchira para resolver el problema “fueron diferidas cinco veces”.
En la ciudad colombiana de Cúcuta se habilitaron 11 albergues, en los cuales habitan 890 menores de edad que llegaron deportados por el régimen de Maduro o por su cuenta, como consecuencia del éxodo que muchas familias emprendieron luego de los violentos tratos por parte de los militares venezolanos.
“En uno de los albergues visité a una niña de 12 años que lloraba y decía que su papá era un buen hombre, honesto y trabajador, y no entendía por qué les hacían eso y los dejaban sin nada. Que una niña de 12 años sufra ese trauma psicológico es una vulneración infame de los derechos humanos. Yo lo califico de cruel e inhumano”, subrayó la titular del instituto encargado de velar por los derechos de los niños y adolescentes.
La mayoría de los niños que quedaron solos del lado venezolano de la frontera con Colombia están viviendo con otros parientes que aún no fueron deportados. En los albergues se contiene a los niños y se les brinda ayuda psicológica, explicó Plazas.
Por su parte, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, evalúa llevar a Venezuela a la Corte Penal Internacional por las deportaciones arbitrarias. “Hay reglas internacionales. Las deportaciones no pueden ser discriminatorias por razones de nacionalidad. No pueden ser masivas ni arbitrarias. Deben ser individuales previa la garantía de un debido proceso y la posibilidad de interponer recursos ante las autoridades”, señaló.