“Es un mensaje que tarde o temprano tendría que producirse porque hay que reconocer, a pesar de que algunos lo nieguen, que la actividad investigativa del Ministerio Público, principalmente en los últimos tiempos, ha dado fuertes golpes a organizaciones mafiosas”, expuso Latorre en diálogo con Buenas Tardes La Unión.
Además, señaló que las amenazas “forman parte de la vida cotidiana” de los fiscales. “No creo que haya algún fiscal que no haya recibido alguna vez algún tipo de amenaza, ya sea para él o para su familia, pero el fiscal simplemente se calla porque sabe que no hay disponibilidad de recursos humanos para que la labor que está desempeñando sea acompañada con medidas de seguridad por parte del Estado”, dijo. No obstante, señaló que pocos pensaban que podría finalmente suceder una situación de tal magnitud como el asesinato de un fiscal, pero que “lamentablemente ocurrió con un excelente fiscal y una persona íntegra como Marcelo Pecci, a quien lo conocí en su trabajo”.
El extitular del Ministerio Público aseveró que el asesinato de Pecci debe servir a la ciudadanía paraguaya para evaluar “hacia dónde estamos caminando y qué es lo que realmente queremos”.
Latorre indicó que uno de los problemas que debe solucionarse es el recorte año tras año que sufre el presupuesto del Ministerio Público, que atenta contra necesidades como la adquisición de tecnologías para mejorar los trabajos de investigación. “Yo, si fuera el fiscal general Estado, iría al Congreso a exigir que me aumenten el presupuesto para potenciar el laboratorio forense. Luego iría a las embajadas de países amigos para pedir apoyo en capacitaciones del personal de investigación”, aseveró.
También comentó que una buena idea sería someter al control de integridad a ciertos fiscales a través de la prueba del polígrafo.
Así mismo, Latorre también citó como cuestión urgente un proceso de saneamiento de las filas de la Policía Nacional.