La viceministra de Política Criminal, Cecilia Pérez, opinó sobre los casos de choferes ebrios que apeligran la vida de los demás, teniendo como referencia el caso del joven, Manuel Ortíz, que ocasionó el accidente que terminó con la muerte de un chofer de la Línea 27.
“Aquí hablamos del consumo de bebidas alcohólicas y un homicidio culposo”, manifestó detallando que en la imputación se presume la negligencia e imprudencia del conductor y una conducta dolosa. “No podemos decir que no sabía (Manuel Ortíz) que cuando toma no debe manejar”, agregó.
“Si el fiscal imputaba al joven por homicidio doloso, tenía que ir preso”, recalcó. Sin embargo, el caso fue calificado de culposo, es decir involuntario o negligente. Asimismo, afirmó que el conductor sí pudo haber tenido una conducta dolosa, porque sabía que al beber alcohol expone al peligro a la ciudadanía.