“El caso de Paraguay es preocupante por los altos porcentajes de informalidad en el empleo y la economía. Trabajar sin seguridad social es un círculo vicioso que termina aumentando la pobreza y al empleado se le menoscaba sus derechos y aumenta su grado de vulnerabilidad”, expresó Cunego en charla con Todas Las Voces por La Unión.
Consultado sobre por qué cuesta mucho para países como Paraguay eliminar la informalidad laboral, dijo que guarda relación con una “cuestión cultural”. “Para cambiar esto, ante todo hay que empezar por un cambio de carácter cultural. Ese cambio lo tienen los trabajadores y los empleadores. Tampoco veo esa intención de cambio y ahí es donde tenemos el primer escollo. Hay que comenzar a pensar en nuestros momentos difíciles, en un trabajo que sea más resiliente y pensar en nuestros ingresos futuros”, expuso.
Indicó que erradicar estas irregularidades debe ser un compromiso tanto del Gobierno como de las organizaciones gremiales, las centrales sindicales y las asociaciones de empleadores.
“Hay que reconocer que en los últimos años ha habido esfuerzos para la formalización, especialmente en cuanto a la simplificación de procesos para la formalización de empresas y microempresas. También ha habido la creación de proyectos de leyes sobre seguro de desempleo, sobre lo cual en Paraguay nunca se había pensado”, señaló.
Cunego aseveró que esta situación no solo se produce en Paraguay, sino también en la región con similares índices, sobre todo luego del inicio de la pandemia del COVID-19.
Avanza formalización pero falta mucho por hacer, según MIC
Isaac Godoy, viceministro de MIPYMES, dependiente del Ministerio de Industria y Comercio, dijo que
“Las herramientas existen y apuntamos a una alianza interinstitucional, en la formación de una red de instituciones que puedan colaborar con el proceso. Muchos no se formalizan por el desconocimiento en cuanto a los trámites. Justamente lo que estamos haciendo es penetrar en ese territorio porque hay mucho desconocimiento”, dijo Godoy en diálogo con Buenas Tardes La Unión.
Destacó que un reflejo del trabajo realizado por la actual administración de MIC es que hayan sido registrados 300.000 nuevos contribuyentes en estos dos últimos años. No obstante, reconoció que “aún queda mucho aún por hacer”.