“Priorizamos unos valores por delante del marcador”. Con esa frase, uno de los coordinadores del Club Deportivo Serranos justificó la destitución de uno de los entrenadores de la institución española, luego de que su equipo se impusiera por 25-0 en el marcador ante Benicalap C.
El hecho tuvo lugar en un partido infantil de la Liga Valenciana. El CD Serranos llegaba a la última fecha sin chances de ser campeón y enfrentaba al último de la tabla, que no había sumado siquiera un punto a lo largo del torneo.
El club busca inculcar valores de respeto y compañerismo a los niños.
El primer tiempo finalizó 15-0 en favor de los locales. Resultado que denotaba la enorme diferencia existente entre los dos equipos compuestos por niños de 10 y 11 años.
En el entretiempo, el entrenador del conjunto ganador ordenó a sus dirigidos convertir la mayor cantidad de goles posibles y el marcador entonces culminó con un lapidario e histórico para la categoría de 25-0.
Los padres de los chicos que ganaron el partido fueron quienes los que se enfadaron con el entrenador.
Esto despertó las quejas de los padres del CD Serranos, quienes no compartieron la decisión del director técnico y entendieron que sus hijos deberían haber jugado con mayor pasividad la segunda mitad.
“Intentamos transmitir empatía y respeto a los rivales. Por eso habría que haber tenido más de respeto por el rival y haber controlado un poquito más ese resultado porque al final que un niño de 11 años se vaya a casa con 25 goles en contra es muy duro“, declaró Pablo Alcaide, colaborador del CD Serranos en diálogo con el diario deportivo español Marca.
Alcaide explicó algunas opciones que el entrenador pudo haber utilizado: “Puedes pedir un número alto de pases, 15 o 16, antes de finalizar, siempre sin mofarlos también decirle a los chavales que jueguen con la pierna ‘mala'”.
La decisión ha repercutido más allá de la liga infantil y el debate sobre si es preferible aplastar en el marcador a un rival o evitar hacer muchos goles se ha ampliado.
Con información de Infobae.