Miss Universo, tierra de reinas de la belleza que defienden la paz mundial. Nunca ha sido el tema favorito de las feministas, pero este concurso —que se basa en quedar por encima de todas las demás— ha caído incluso más bajo que los comentarios de su cofundador Donald Trump sobre las mujeres, los mexicanos, los musulmanes y casi todo el mundo desde que inició su terroríficamente exitosa campaña presidencial. El agravio incluso empujó a los socios de Trump, la NBC, a vender sus acciones e impedir la emisión del certamen de Miss Universo en sus canales.
Con este telón de fondo, resulta poético y enternecedor ver surgir una auténtica celebración de la belleza de la diversidad en uno de los más de 190 países que participan cada año. Evita Delmundo, una mujer de 20 años nacida en Sabah, Borneo, que participa en el concurso como Miss Universo Malasia, ha protagonizado varios titulares (y ha conseguido montones de seguidores en Instagram) con su aspecto único, porque su rostro y su cuerpo están cubiertos de lunares.
En una entrevista sobre el concurso, Evita le contó a Elle Malasia que siempre había soñado con presentarse a Miss Universo: “Creo que es una buena forma de exponer mi singularidad y la nueva confianza que he adquirido. Y espero también poder inspirar a otras personas”. Sus 43.400 seguidores de Instagram sugieren que ya lo ha hecho. “Algunos de mis seguidores de Instagram me han dicho que soy su ídolo o que me ven como su inspiración”, afirma. “Saber que tengo un efecto tan positivo en los demás me ayuda a seguir adelante”.
Aunque Evita ahora está orgullosa de su belleza única, no siempre fue fácil. “Sufrí bullying en primaria y los demás niños me llamaban cosas como ‘Monstruo’ o ‘Chipmore’ [una marca de galletas con pepitas de chocolate]”, revela a Elle Malasia. Cuando le preguntan si alguna vez pensó en quitarse los lunares, Evita explica que al principio sí quería: “Pero tras pedir consejo a varios médicos, me di cuenta de que sería un riesgo para mi salud”, dice, añadiendo que ahora está agradecida de no haber cambiado nada.
Tras haberse presentado al casting, Evita está esperando respuesta de Miss Universo Malasia, cosa que Elle Malasia indica que sucederá pronto. “La belleza no es solo lo que hay en el exterior, no es alguien con la cara perfecta o el cuerpo perfecto”, dice Evita cuando le preguntan por su definición de belleza. “La belleza es quién eres como persona y cómo te quieres a ti mismo. No tiene nada que ver con la perfección”. Si eso no es la respuesta de una ganadora del concurso, no sé qué puede serlo.
Fuente: INFOBAE