En ese sentido, la letrada dijo que la jueza del caso incluso le sacó la personería. Sobre el punto, dijo que lo hizo porque es una “lacaya” del juez Kriskovich y que ya presentó una denuncia en su contra al respecto.
Mencionó que el Ministerio Público jamás accedió a la realización de una pericia de celulares y que bajo ningún sentido permiten que el caso sea elevado a juicio oral.
Así mismo, con respecto al caso “compra de notas”, y por el cual cuenta con orden de captura, dijo que su defendida nunca estuvo involucrada en el tema y que mucho menos pudo haber modificado el sistema informático de la universidad para poder hacerlo.
La denunciante había presentado como prueba varios mensajes de textos vía WhatsApp, los cuales fueron admitidos como reales por el Ministerio Público, pero con la calificación de que tenían un contexto de “galanteo”, deslindando de cualquier posible culpa al docente.