El próximo martes 21 de diciembre se realizará la jornada de intensificación de vacunación con el COVID-19 en el departamento de Canindeyú y se delinean estrategias para la aplicación de las dosis, en horarios diferenciados, en los que se puedan encontrar a los ciudadanos en sus hogares, así como en comercios y en las comunidades rurales.
La Dra. Lida Sosa, viceministra de Rectoría y Vigilancia de la Salud, manifestó que el trabajo articulado con todas las instituciones públicas y privadas de Canindeyú, darán una perspectiva más amplia de vacunación, según sectores.
Canindeyú es el quinto departamento con más casos de fallecidos, según el reporte epidemiológico, lo que requiere de una intervención para poder disminuir la brecha de contagios e internados de gravedad.
La Dra. Sandra Irala, directora general de Vigilancia de la Salud, manifestó que el impacto de una eventual nueva ola depende de las acciones que se tomen. “Si no vacunamos será alta (la incidencia de la ola), si hacemos nuestro trabajo, tendría un impacto mucho menor”, expuso.
En líneas generales, existe un aumento de casos y fallecidos por COVID-19, en Canindeyú. Es necesario rastrear contactos de casos positivos para aislar y evitar contagios.
El COE Regional tiene como objetivo apoyar los trabajos de vacunación para el aumento de la cobertura, establecer alianzas con empresas y productores, realizar control de viajeros, dotar de apoyo logístico y RR.HH. en brigadas de vacunación. A esto se debe sumar la promoción de medidas sanitarias de protección por líderes de opinión: iglesia, sector educativo, políticos locales y el fundamental apoyo de municipios.
Por su parte, el Dr. Héctor Castro, director del Programa Ampliado de Inmunizaciones – PAI, expresó que es momento de un mayor compromiso de todos los sectores para repuntar los indicadores de vacunación.
En Canindeyú, el 32% de la población objetivo cuenta con una dosis (unas 57 mil personas) y solo el 25% ha completado las dos dosis.