“Nosotros ante la denuncia de los indígenas, estamos tomando intervención en el caso”, afirmó el Dr. Ricardo Brassel, director de la II Región Sanitaria (San Pedro), en contacto con La Unión.
En ese sentido, subrayó que estos medicamentos no son aplicables a seres humanos. De hecho, los nativos aseguraron tener durante el fin de semana dolores de cabeza, mareos y otros malestares, según reveló Aníbal Vera, miembro de la Comunidad Indígena Santa Isabel, quien agregó que quienes les obligaron a aplicarse esas vacunas para animales fueron dueños de la estancia El Misionero, dedicada a la producción de bananas.