“Es el grupo de gente que fue traído de Ñacunday, de las tierras de Favero, y fue llevado a la colonia Santa Lucía. Se les adjudicó tierras y se acondicionó el lugar. Lo que pasa es que un grupo de adjudicados quedó sin sus parcelas agrícolas. Se aprobó el plano en catastro nacional para dar títulos a los que estaban. Los que no estaban no pudieron ingresar en las parcelas porque algunos estaban usando esas tierras con medidas cautelares. Entonces designé un equipo jurídico que está trabajando en eso, incluso ya recuperó 150 hectáreas en las que ya se le reubicó a la gente”, explicó González en diálogo con Nuestra Mañana a través de Unión TV y radio La Unión.
Sobre el punto, expuso que los que estaban usando la tierra sin ser sujetos de la reforma agraria eran terceras personas que habían recurrido a medidas cautelares e interdictos, las cuales están siendo levantadas por el INDERT. “Estamos reivindicando judicialmente y eso lleva un tiempo (…) Nosotros más estamos avanzando en tema de titulación, estamos avanzando muchísimo”, dijo.
Recordó que el problema surgió en el año 2014. “Es muy complejo. Yo estoy heredando este problema. Son conflictos que quedaron y que no se resolvieron en ese entonces”, aseveró González.