“Siempre nos mantuvimos en que el impacto de esta situación es negativo. Eso se nota en las calles totalmente desoladas, estuve recorriendo y no se ve casi nada de gente. Parece un domingo. Está todo desactivado en el Alto Paraná”, expresó Juan Vicente Ramírez, representante de la Cámara de Comercio de Ciudad del Este, manifestando su preocupación por la nula presencia de turistas desde ayer, pese a ser consciente por la prioridad que le ha dado al Gobierno a la salud de la población paraguaya.
Aseveró que la disposición del Poder Ejecutivo de prohibir el ingreso de extranjeros no residentes en Paraguay los tomó de sorpresa, por lo cual avizoran un futuro económico negativo para el comercio esteño, más aún si la medida de cuarentena se extiende más allá del 25 de marzo, fecha para la cual, en principio, está emplazada su culminación.
En ese orden, Ramírez afirmó que de todos modos no cerrarán las puertas.