Trabajadores humanitarios que llegaron hasta una localidad Siria sitiada hablaron de las “desgarradoras” condiciones que están padeciendo los esqueléticos y hambrientos residentes, cientos de los cuales necesitan atención médica especial.
Una caravana de ayuda humanitaria entregó el lunes el primer cargamento en meses de alimentos y productos médicos en la localidad occidental de Madaya, donde hay 40.000 personas atrapadas en un cerco de las fuerzas gubernamentales y donde los médicos locales dicen que algunos residentes han muerto de hambre.
“Es realmente desgarrador ver la situación de la gente”, dijo Pawel Krzysiek, del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). “Hace poco se me acercó una niña pequeña y su primera pregunta fue si había traído comida porque están realmente hambrientos“, agregó.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que pidió al gobierno sirio que le permita enviar clínicas móviles y equipos médicos a Madaya para evaluar el alcance de la malnutrición y evacuar a los casos más graves.
Un médico local dijo que entre 300 y 400 personas necesitan atención médica especial, según Elizabeth Hoff, representante de la OMS en Damasco, que viajó a Madaya con la caravana. “Estoy realmente alarmada”, dijo Hoff a Reuters por teléfono desde Damasco.
“La gente se reunió en el mercado. Se podía ver a muchos desnutridos, hambrientos. Estaban flacos, cansados, gravemente angustiados. Nadie sonreía. No es lo que se ve cuando uno llega con una caravana. Los niños con los que hablé dijeron que no tenían fuerzas para jugar“, agregó.
FUENTE: Infobae