“Al comienzo de lo ocurrido, los internos comenzaron a ‘recolectar’ a varios compañeros de diferentes pabellones para tomarlos de rehenes. Ellos ni siquiera su celular pudieron usar, se ingeniaron para poder luego de eso comunicarse”, manifestó Miriam Orrego, miembro del Sindicato de Funcionarios Administrativos y de Seguridad Penitenciaria, en charla con La Unión.
Indicó que en medio del motín dos guardiacárceles suyos quedaron heridos y fueron trasladados a un hospital, sin tener hasta estas horas reportes de su estado de salud. “Los internos acostumbran a hacer. Es una guerra interna entre ellos y de la cual siempre mis compañeros son las víctimas”, cuestionó.
Orrego destacó el trabajo de la ministra de Justicia, Cecilia Pérez, para descomprimir el motín, que comenzó por la tarde y se disipó ya entrada la noche.
Dos motines se produjeron este martes en el penal de Tacumbú. Aunque el primero, registrado en la mañana, logró ser controlado, por la tarde ocurrió que dejó como saldo hasta el momento seis fallecidos, todos ellos reos. Inicialmente, la razón de los amotinamientos era la idea del Ministerio de Justicia de trasladar al interno Orlando Efrén Benítez a otro penal. Sin embargo, posteriormente ciertos reclusos protagonizaron la masacre.