“No nos dejemos engañar, están tan débiles que nos quisieron manipular con un diálogo, fuimos a la invitación de un país amigo como Noruega”, dijo Guaidó, quien es reconocido como presidente interino por más de medio centenar de países, durante un acto en Guatire, al norte de Venezuela.
El también presidente de la Asamblea Nacional agradeció todos los esfuerzos de las partes que han querido sacar adelante este diálogo, pero enfatizó en que están “claros” en su idea y que “no se van a confundir”.
El pasado jueves, el propio Guaidó confirmó que hay contactos entre el Gobierno y la oposición propiciados en Oslo por Noruega. No obstante, ha advertido que estas conversaciones deben conducir al “cese de la usurpación” que considera que hace Maduro de la Presidencia.
Este sábado pidió seguir avanzando en esa dirección, en un “Gobierno de transición y elecciones libres”, al tiempo que le exigió a los funcionarios públicos que se pongan del lado de la Constitución, pues “llegó el momento de Venezuela”.
“La dictadura está derrotada, conquistemos la democracia (…). Llegó el momento de avanzar para conseguir la libertad”, afirmó.
Guaidó recordó que a principios de este año se pensaba que esta era una “lucha desigual, de David contra Goliat”, pero enfatizó en que no eran “tan pequeños”.
“Resulta que contamos por millones en Venezuela y hoy sentimos que es un choque de trenes”, añadió el líder del Parlamento.
La tensión en Venezuela se incrementó desde que el pasado 23 de enero Guaidó se adjudicara las competencias del Ejecutivo como presidente encargado del país por considerar ilegítimo a Maduro tras ser reelegido en unos comicios que la oposición tacha de «fraudulentos».
Esta acción aceleró la crisis política en Venezuela, debido a que, buena parte de la comunidad internacional, con países como Estados Unidos, varios europeos y latinoamericanos, ha dado su respaldo a Guaidó y presiona para que se convoque a elecciones.
«Aquí llegamos porque votamos, aquí llegamos porque no votamos (…), llegamos porque contestamos, porque hicimos huelga de hambre, llegamos porque hicimos todo. Llegó el momento de hacer todo, de combinar presión internacional, presión diplomática (…)», remató.
Maduro había dicho ayer que el proceso exploratorio en Noruega entre su Gobierno y la oposición para entablar una posible mesa de negociaciones que construya «acuerdos de paz» avanzaba con progresos.
«Regresa nuestra delegación de Noruega con buenas noticias, se han iniciado con buen pie las conversaciones para avanzar hacia acuerdos de paz, de concordia, de armonía», dijo el mandatario durante un acto en el que condecoró a varios militares.
Entre septiembre de 2017 y enero de 2018, Gobierno y oposición se sentaron a la mesa de diálogos en República Dominicana. Sin embargo, las conversaciones no fueron fructíferas y el oficialismo terminó convocando unas elecciones a las que compareció casi en solitario y que no han sido reconocidas por una gran parte de la comunidad internacional.
Con información de EFE.