Luego de cinco días sin declaraciones públicas, hacia el final de la tarde del lunes se difundió un video en redes sociales en el que el líder opositor anunciaba, sin precisar su ubicación, su pronto retorno al país “con compromisos de nuestros aliados, con acciones y medidas que se irán ejecutando”.
Guaidó inició el 19 de enero una gira internacional que incluyó visitas a Bogotá, Londres, París, Bruselas, Madrid, Ottawa, Miami y Washington para estrechar relaciones con algunos de los más 50 países que lo han reconocido como jefe de la Asamblea Nacional y presidente interino de Venezuela. Su última aparición ante los medios fue el 5 de febrero, cuando se reunió con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca.
“Nos toca unirnos como nunca para continuar la lucha con movilización popular dentro y fuera de Venezuela”, afirmó el político, llamando a sus seguidores a retomar las acciones en la calle contra Maduro, reducidas en los últimos meses debido a una creciente decepción de los venezolanos con la oposición.
En su discurso, Guaidó resaltó como uno de los logros de su gira que los países aliados están dispuestos a “aumentar la presión hasta el máximo nivel que haga falta”, pero no ofreció detalles.
Hay una gran expectación en torno al regreso del líder opositor, ya que ni él ni los miembros de su equipo han informado cómo ingresará, o si lo hará de la misma manera secreta que abandonó el país en enero cuando viajó a Bogotá.
El Tribunal Supremo de Justicia le prohibió el año pasado salir del país, tras un proceso que le inició la Fiscalía General por su supuesta participación en unos hechos violentos. Las autoridades abrieron el año pasado cinco procesos al jefe del Congreso y le retiraron la inmunidad parlamentaria.
Pese a la prohibición de salida, Guaidó viajó en febrero del año pasado de manera secreta a la ciudad colombiana de Cúcuta, cercana a la frontera con Venezuela, para participar en un concierto benéfico y promover el ingreso al país de varias toneladas de ayuda humanitaria que fueron bloqueadas por las fuerzas de seguridad. Tras la visita a Colombia, el político emprendió una gira por varios países de la región y retornó en marzo a Caracas en un vuelo comercial desde Panamá.
El jefe de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, ha asegurado que “no va a pasar nada” cuando vuelva Guaidó al país, mientras Maduro y otros dirigentes del gobierno han exigido abrir nuevos procesos contra el líder opositor.
Tras la difusión del vídeo de Guaidó, Cabello dijo la noche del lunes, dirigiéndose a los opositores, que “les viene otra amarga decepción” y expresó en su cuenta de Twitter que “con el Chavismo no han podido ni podrán”. A pesar de las crecientes tensiones internas y externas que enfrentó el año pasado, Maduro logró superar la crisis gracias en parte al apoyo del alto mando militar.
A inicios de año el oficialismo elevó las presiones contra Guaidó y la mayoría opositora de la Asamblea Nacional al impedirle, con el apoyo de las fuerzas de seguridad, acceder al Palacio Legislativo, donde solo opera la Constituyente y una directiva paralela del Congreso que se juramentó el 5 de enero encabezada el diputado Luis Parra. Parra es un disidente del bloque opositor que fue expulsado en diciembre del partido Primero Justicia tras ser acusado de presuntos hechos de corrupción. Además, miembros de la policía política tomaron el mes pasado un piso donde había oficinas privadas de Guaidó.
Ante las limitaciones para entrar al Palacio Legislativo, durante las últimas cuatro semanas la mayoría opositora de la Asamblea Nacional ha celebrado sus sesiones semanales en diferentes plazas de la capital.
Con información de The Associated Press.