“Estamos preocupados y en ese sentido emitimos un comunicado pidiendo a las autoridades construir una mesa de diálogo. Pedimos que las leyes sean iguales para todos, porque las restricciones siempre se aplican a los negocios formales”, criticó Carlos Díaz, director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Bebidas Alcohólicas, en contacto con La Unión.
Así mismo, señaló que ciertas “bodegas informales de barrio” están ofreciendo servicios de delivery fuera del horario permitido, lo cual atenta también contra el sector formal. “En medio de la pandemia venimos de un año muy difícil, pese a todo sostenemos los puestos de trabajo y contribuyendo con nuestros impuestos a las arcas del Estado”, cuestionó.
En ese sentido, garantizó que, en caso de levantarse la disposición que restringe la venta de bebidas alcohólicas, los comercios continuarán trabajando bajo los protocolos que dispongan el Ministerio de Salud.
La Cámara Paraguaya de Bebidas Alcohólicas está compuesta mayormente por cadenas de bodegas y estaciones de servicios pertenecientes a APESA (Asociación de Propietarios y Operarios de Estaciones de Servicios y Afines).