Como habían anunciado, el papa Francisco estrenó hoy su cuenta de Instagram bajo el nombre Franciscus, y lo hizo con una imagen en la que se lo ve rezando en soledad, junto a un pedido en nueve idiomas: “Recen por mí”.
La cuenta papal, como ocurrió con la de Twitter, tuvo un éxito inmediato. A las 12.25 de Roma (8.25 en la Argentina), 25 minutos después de abrir la cuenta y cuando ya pasaba los 10 mil seguidores, publicó su primera foto en la que se lo ve rezando, con los ojos cerrados y la cabeza gacha. Antes de cumplir una hora, la cuenta ya tenía 55.000 seguidores.
“Inicio un nuevo camino, en Instagram, para recorrer con ustedes el camino de la misericordia y de la ternura de Dios”, señaló el pontífice en Twitter, otra de las redes sociales por las cuales difunde su mensaje y en la que ya tiene más de 26 millones de seguidores en nueve cuentas de diferentes idiomas.
La apertura del perfil papal -verificado- en la red social de las imágenes se produce después de que el pasado febrero el papa Francisco mantuviera en el Vaticano una reunión con el consejero delegado de Instagram, Kevin Systrom.
Entonces Systrom publicó en Internet que durante su encuentro con el pontífice, ambos hablaron del “poder de las imágenes para unir a personas de diferentes culturas y lenguas”.