Dejando de lado los modos más convencionales de educación, ella les enseña todo lo que necesitan en casa y les da la preciada libertad de conocer al mundo por ellos mismos. Hasta la fecha han pasado tres años en los que ellos han vivido sin tecnología, a excepción de la cámara.
Niki Boon empezó a tomar fotos como pasatiempo cuando trabajaba como físico terapeuta en Escocia. Pero su interés por el arte empezó en sus viajes. No fue hasta que regresó a casa y formó una familia cuando su pasión se reavivó.
Es mi pasión capturar cuanto pueda del día a día y las aventuras de mis cuatro pequeños hijos. Trato de tomar las más significativas fotos, las que cuentan sus historias, nuestras historias que son pedazos de mí afirma Niki Boon.
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
Fuente: Niki Boon
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Ella cuenta que para el cumpleaños de cada uno de sus hijos, les ha regalado las fotos que son parte de su serie. Ellos tienen un pedazo de mí, de mi amor por todo lo que hacen y por todo lo que son asevera la fotógrafa.
Fuente: Feature Shoot