El departamento de prensa de la 800AM accedió al documento dirigido a Fernando Lugo. La fiscal Casse Giménez acusó que el ahora ex-senador le pidió US$ 10.000 para hacer que una denuncia contra la también fiscal, Karina Giménez, siga su curso en el Jurado de Enjuiciamiento.
Este episodio del escándalo que estalló con los audios filtrados puede ser clave, pues explica y vincula a Oviedo Matto con Óscar González Daher, también ex-senador a quien le retiraron la investidura. Además, todo tendría relación con el Fiscal General del Estado, Javier Díaz Verón, ahora de vacaciones en Cancún, y específicamente con su hijo, donde estaría la raíz de todo.
De acuerdo con la declaración presentada por Casse, Karina Giménez tomó un caso de robo agravado que estaba siendo investigado por la ahora fiscal denunciante, que ya contaba con imputados y una orden de detención para Fernando Rubén Ayala Barrios, sospechoso del hurto.
Lo detallado en la declaración da cuenta de que Karina entra al ruedo en febrero de 2017, en medio de un permiso de salud que tenía Casse, e inmediatamente levantó la medida que pesaba contra Ayala Barrios, amigo y compañero de Alejandro Díaz Morínigo, hijo de Javier Díaz Verón. Por su parte, el Fiscal General refrendó esta actuación y reasignó la causa a Karina Giménez.
Ante esto, Casse junto a la familia de la víctima del robo agravado recurren al Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, denunciando a Karina y logrando que esta sea enjuiciada, pero esta resolución no se firmó ni se dio a conocer públicamente, menos se comunicó a la Corte Suprema de Justicia.
No obstante, el caso fue ‘cajoneado’ y detrás de esto estaría Raúl Fernández Lippmann, secretario de Óscar González Daher, en ese momento presidente del JEM. Entonces, Casse junto a un abogado del foro visitan a González Daher, pero este asegura que si su secretario está estancando la causa le ‘cortaría la cabeza’.
Aún así, la respuesta no convence y buscan otro nexo para llegar a una solución; ahí aparece Oviedo Matto, miembro del Jurado en representación del Senado. “Quería saber porque si se había resuelto el enjuiciamiento nunca se firmaba la resolución ni se notificaba a la Corte”, dijo Giménez.
Casse logra una entrevista con Oviedo Matto el 2 de agosto de este año. La fiscal llega con su asistente Fermín Bogado, a su vez hermano de la víctima de robo; el hombre explicaría los pormenores del caso.
Según el escrito, Matto escuchó atentamente a los denunciantes, para luego exponer ‘su poder’ ante los presentes, recordando el caso del fiscal Luis Piñanez, quien no era confirmado en su cargo por la Corte, y lo había ‘ayudado’ Jorge Oviedo comunicándose directamente con el presidente de la República Horacio Cartes. Este último dio la orden a los ministros de la CSJ, Alicia Pucheta y Antonio Fretes, para que la confirmación se acabe dándose casi al instante. En otras palabras, el ex-senador se habría jactado de su influencia, teniendo línea directa con el mandatario.
Posteriormente, el político del Unace realizó el pedido de US$ 10.000 para luego reducir el ‘precio’ a la mitad. La fiscal se niega, pero exponiendo que no contaba con la cantidad de dinero.
“Trate de no evidenciar mi molestia y le explique que no disponía de ese monto, y que iría el día siguiente a ver la posibilidad de un crédito en el Banco. Mi objetivo al decirle eso no fue darle una respuesta positiva, sino zafar elegantemente de su planteamiento”, escribió.
En ese momento Casse se refiere al audio filtrado de la conversación que mantuvo ella con Oviedo Matto, en donde él dice “amanecé mañana en el banco Casse, yo te voy a solucionar ese problema. Ani ejepyapy”. A lo que la fiscal responde ahora en su declaración “¿para que les parece a uds. que yo debía amanecer en el banco? ¿o a qué clase de banco se estaba refiriendo?”.