La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, en inglés) puso fin a una norma que prohibía donar sangre a los hombres homosexuales y bisexuales y permitió que a partir de ahora lo hagan los que no hayan mantenido relaciones con otros gays en los últimos doce meses.
La norma revocada llevaba más de 30 años en vigor y la FDA manifestó que su actualización refleja “la más actual evidencia científica” y el planteamiento adoptado en otros países como Australia y el Reino Unido.
“La responsabilidad de la FDA es mantener un alto nivel de seguridad de los productos sanguíneos para las personas cuyas vidas dependen de ello”, dijo el comisionado interino de la FDA, Stephen Ostroff, en un comunicado.
“Hemos tenido mucho cuidado para asegurarnos de que esta revisión de la política está respaldada por conocimientos científicos sólidos y continúa protegiendo nuestro suministro de sangre”, añadió Ostroff.
Fue en 1983 cuando la FDA prohibió la donación de sangre de cualquier hombre que hubiera tenido relaciones sexuales con otro hombre, aunque hubiera sido una sola vez, desde 1977.
Se trató de una decisión tomada a raíz de la crisis del Sida que vivió el país, cuando los conocimientos sobre el VIH eran muy limitados y se buscaba la manera de detener su propagación