Emilio Verruck, jefe del Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aéreos (CIPAA), explicó que las labores en estos momentos se centran en un vaciamiento de agua del lugar con motobombas, previo acordonamiento del sitio con retroexcavadoras. “No queremos modificar mucho la escena”, dijo en contacto con La Unión R800 AM, añadiendo que según lugareños los esteros llegan a hasta 9 metros de profundidad.
En este orden, señaló que luego de extraer la aeronave, la trasladarán hasta su taller ubicado en Asunción para el análisis. “Vamos a hacer las pericias técnicas y ver si podemos rescatar alguna información o instrumentos”, dijo, agregando que “entre hoy y mañana vamos a estar retirando el fuselaje”.
Así mismo, descartó que se haya producido fuego en el aire antes de que la aeronave se precipitara, detallando que se hallaron restos de combustible y aceite de motor en el agua. En este sentido, mencionó que, de acuerdo a los datos proveídos por el Ministerio Público, el aparato había recibido un reciente mantenimiento.