“Hay muchísimas necesidades en el sector en cuanto a la reconversión de los negocios. Hay gremios que están ayudando a sus asociados y a los que se acercan para saber estas reconversiones, sumado al oxígeno financiero”, dijo Bruno Defelippe, presidente de la ASEPY, en contacto con La Unión. “Hay sectores con facturación cero, locales cerrados y otros que hacen delivery pero que no alcanzan los mismos números de antes”, agregó.
En ese sentido, recordó que el 90% del tejido empresarial está compuesto por Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MIPYMES), según el Ministerio de Industria y Comercio (MIC), mientras que el 67% de los trabajadores están en estas mismas instituciones, según la Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos (DGEEC). Entonces, todas esas bondades de las que el Gobierno alardea, son una burla.
En ese orden, Defelippe comparó que el Banco Nacional de Fomento (BNF) entregó 635 créditos hasta el momento, mientras que el Fondo de Garantías (FOGAPY) logró respaldar solo 143 préstamos a hoy día.
Como ejemplos del golpe económico, citó que la facturación de las PYMES cayó prácticamente a cero y que, en algunos casos, se está “estirando” en el cuidado de los empleos pero reduciendo costos y salarios.
Defelippe señaló que el sector de MIPYMES espera una mayor y más rápida asistencia del Gobierno para resurgir en este inicio de reactivación económica a través de la Cuaretena Inteligente, estimando que la mayoría de las que están funcionando o en suspensión no aguantarán por mucho tiempo más.