Luego de registrar los primeros casos de zika durante 2015, el virus se ha propagado en casi toda la región con una gran velocidad. Esto se explica por la ubicuidad del mosquito transmisor además del dengue y la chicunguña, indicó a la agencia de noticias AFP el jefe del departamento de Enfermedades Transmisibles de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Sylvain Aldighieri.
Aunque todavía los profesionales no han podido asegurar que el contagio en mujeres embarazadas produzca microcefalia en el feto, científicos brasileños confirmaron que se transmite de madre a hijo a través de la placenta.
Actualmente hay casi 3.900 casos sospechosos de esta malformación en Brasil.
En el mes de noviembre, cuando se anunció el posible vínculo entre el zika y la microcefalia, se habían registrado 1.248 casos. En todo 2014, a 147 bebés les diagnosticaron microcefalia en Brasil.
La microcefalia ocurre cuando la circunferencia del cráneo es igual o inferior a 33 centímetros y acarrea dificultades en el desarrollo intelectual. Además de estudiar la vinculación que podría existir entre el zika y la enfermedad en el feto, los científicos analizan si podría causar también una parálisis que pueda ser irreversible, llamada Guillain-Barré.
Esta situación ha sido aprovechada por los vendedores de repelentes, quienes han aumentado considerablemente sus precios a raíz de la situación.
Fuente: Infobae