“Era algo que podía pasar porque estamos muy expuestos, yo principalmente, por mi especialidad”, expresó en diálogo con La Unión, considerando que fue ella quien llevó el virus a su casa precisamente la labor que ejerce.
Comentó que su madre y a ella fueron contagiados con el COVID-19 y también su padre, de 55 años, aunque a él sí le tomó de forma más fuerte debido a que carga con varias enfermedades de base, como hipertensión y diabetes que por estos cuadros incluso en su momento llegó a la diálisis, teniendo que ser internado.
“Nos cuidamos muchísimo porque sabíamos que podía pasar, pero pasó. Lastimosamente nos tocó. ¿Cómo? No sabemos”, expuso en contacto con La Unión. “De mi papá nos despedimos y quedó internado desde el lunes. Tratan de que no tenga tanta comunicación con nosotros, más allá de que tiene su celular, porque el tema de que él se agita todavía”, expuso, aclarando que su padre está internado en sala común pero con oxígeno.
La obstetra aseveró que la fortaleza mental ha sido clave para sobrellevar este mal momento.
Criticó a la parte ciudadanía que aún “no cree” en el virus o lo minimiza calificándola de “gripe común”, por lo cual no cumple con los recaudos sanitarios, sobre todo con respecto al uso de tapabocas. “Hay mucha gente que no está tomando en serio esto. Parece que son pocas las personas que entraron en razón. Algunos si qué se enojan por pedirles algo tan simple como es ponerse correctamente el tapabocas”, indicó.
En cuanto a su trabajo, dijo que hay mujeres que llegan al momento del parto pero no cuentan todos los detalles con relación a haber estado contagiada o estado en contacto con algún caso positivo de COVID-19, por temor a separarse de sus bebés.