En su último día por Chile, el Papa Francisco de forma sorpresiva, y contra todo protocolo, casó a dos tripulantes de la aerolínea en que viajaba. El Pontífice celebró el sacramento en pleno avión y escribió el certificado de matrimonio a mano dándole veracidad con su firma y otros testigos.

Carlos, mayordomo, y Paula, azafata, de Latam, ocho años después de haberse unido en lo legal, fueron hasta Francisco para pedirle su bendición. Cuando se le acercaron el Papa les preguntó si estaban casados. Ellos respondieron que sí pero de forma legal, ya que ante la Iglesia no lo hicieron a causa del terremoto que azotó Chile en el 2010 que los dejó con el templo destruido.

Ante la negativa de respuesta, el Papa les dijo: “bueno yo los caso, ¿están seguros?, necesito un testigo”. Inmediatamente fueron a buscar dos testigos y la pareja dio su sí ante Dios con la bendición de Francisco.

Al culminar la celebración del matrimonio se elaboró un certificado matrimonial hecho a mano en papel, un documento vaticano por orden del Papa, redactado por los cardenales y firmado por los testigo, los esposos y el Papa.

“Estamos muy contentos. Yo no hablo mucho porque todavía estoy en schock pero estamos muy contentos y emocionados”, expresó Paula.

Los esposos, sumamente conmovidos, se bajaron en Iquique, donde celebrarán y tendrán una luna de miel pequeñita hasta este viernes.E

Es la primera vez que un Papa casa a dos tripulantes en un avión. Por lo tanto, más allá de la anécdota emotiva que todos recordarán, este hecho también se transformó en un hecho histórico.

Fuente: Aleteia.

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